En el año 1995 el Festival de Eurovisión tomó una nueva dimensión. Un tema prácticamente instrumental, "Nocturne", acabó ganando ante la atónita mirada de muchos (he de admitir que me encontraba entre los sorprendidos), ya que se consideraba un "festival de la canción". Los responsables de la particular hazaña: el duo Secret Garden, formado por el compositor y músico noruego Rolf Lovland (piano y teclados) y la violinista irlandesa Fionnuala Sherry (violín y vocales); sin olvidar a Gunnhild Tvinnereim, encargada en esta ocasión de la parte vocal del tema. Gracias a la proyección del Festival y a un gran trabajo, su primer album "Songs from a Secret Garden" (1996), el reconocimiento internacional no tardó en llegar, superando el millón de copias en los cinco continentes.
Durante la grabación de su tercer trabajo, "Dawn of a New Century", grabaron un concierto en Lillehammer para la Televisión Pública Norteamericana (PBS), al que pertenece la actuación que os presento a continuación. Tal como nos cuentan los autores, "Prayer" es una llamada a esos espíritus a los que pedimos ayuda cuando nos encontramos en situaciones incómodas o nos sentimos vulnerables, para servirnos de guía o sentirnos protegidos.
Tanto en esta ocasión como en la grabación del disco contaron con una colaboración de lujo: Karen Matheson, vocalista del grupo escocés de música celta Capercaillie .
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Se puede encontrar "Prayer" en el disco "Dawn of a New Century" y el DVD "A night with Secret Garden":
Donde también aportaron sus voces los integrantes del coro irlandés Anúna.
Curiosidades:
-Podéis ver a Karen Matheson cantando "Ailein Duinn" en la película "Rob Roy"(1995), en cuya Banda Sonora colabora Capercaille, acompañando a las instrumentales de Carter Burwell.
-Secret Garden son todo un ejemplo de lucha y superación personal. Fionnuala Sherry volvió a tocar el violín tras romperse el hombro por dos partes, al caerse por una escalera durante la promoción del primer disco. Tras dos operaciones y largas sesiones de fisioterapia, Fionnuala y Rolf (que ya estaba preparando el siguiente disco cuando ocurrió el desafortunado accidente) siguieron trabajando con la misma ilusión, pese a los frecuentes dolores que ella todavía arrastraba, ya que, aunque la parte de violín era más exigente, no querían que el accidente fuera una excusa para perder todo lo que habían ganado. Y tanto es así que la violinista comenzó a tocar incluso a mejor nivel y Rolf desplegó su talento creativo con nuevas y cada vez mejores composiciones.
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